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Un regalo especial que se convirtió en oportunidades

Alberto de Cárdenas nos brinda unas palabras especiales por Navidad

PorAlberto de Cárdenas

Noviembre 19, 2020

Las festividades están muy cerca y estoy seguro que muchos de ustedes ya están pensando en el regalo perfecto para sus seres queridos. Dar regalos en navidad en la mayoría de países tiene un gran impacto comercial para muchas compañías y organizaciones, considerando el año que hemos tenido probablemente sea lo que más necesitemos. 

Déjame contarte una historia. Hace casi 20 años cerca de las fiestas navideñas, recibí el regalo más valioso que he podido recibir de alguien que apenas conocía. Este cambio mi vida y me hizo re evaluar mis metas de vida (aunque en ese momento aún no lo sabía).  

Primero, déjame contarte un poco sobre mí. Desde que terminé el colegio, tenía claro que quería hacer un MBA y dado que era un chico ambicioso, sabía que sólo podía ser de una de las mejores escuelas del mundo: Tuck (Dartmouth), la escuela de mis sueños, el lugar del que quería formar parte. Mi constancia me hizo graduarme entre los primeros de la clase de la mejor universidad de Perú, conseguir el trabajo que quería de inmediato (sólo solicité a dos), y tener éxito rápidamente. Luego, el éxito para mí estaba en cuán pronto iba a ser CEO, número de empleados, opciones de compra de acciones, bono de fin de año, entre otros 'beneficios'.

En 2001, presenté una solicitud a Tuck y entré. Estaba muy entusiasmado con ello. Iba a ser capaz de cumplir mi sueño. Sin embargo, fue justo después del 11 de septiembre cuando fue difícil para los extranjeros como yo conseguir becas o préstamos. Tuck me brindó su ayuda, pero no fue suficiente.  Pensé que sería el final de este sueño para mí, pero el destino quiso que recibiera un regalo muy generoso de alguien en Perú que apenas conocía.  Llamo a esta persona, mi ángel.  De alguna manera se dio cuenta de mi situación y se ofreció a pagar mi MBA con una condición: me dijo 'Quiero que hagas algo por alguien que lo necesite. Lo que hagas, cuando lo hagas, cómo lo hagas, con quién lo hagas, o a quién impactes... no importa.” Incluso dijo 'Nunca voy a preguntarte si lo hiciste o no'. Depende de ti y de tu conciencia'. 

Finalicé mi MBA en Tuck y me concentré en 'hacerlo' - pospuse todo el asunto de 'hacer algo para ayudar a alguien' para una fase diferente de mi vida y continué con mis ambiciones profesionales- me mudé a la ciudad de Nueva York, trabajé como consultor de gestión viviendo la vida de soltero en la ciudad que nunca duerme, trabajé duro, me divertía muchos los fines de semana, ahorré un poco de dinero, etc.  En el fondo, sabía que en algún momento volvería a Perú, pero fue en marzo de 2013 cuando mis planes cambiaron abruptamente al recibí una llamada de mi padre.  Él me dijo: “Me han diagnosticado cáncer de fase 4 y que los médicos me han dado 3 meses de vida.”

En una semana, dejé mi trabajo y volví para estar con él.  Han pasado 7 años, mi padre sigue con nosotros y yo sigo en Perú.  La enfermedad de mi padre me obligó a enfrentarme no sólo a mis ambiciones, sino que el hecho de estar de vuelta en Perú me recordó que todavía tenía un compromiso que cumplir, una promesa que mantener, una promesa informal que cumplir. Necesitaba devolver, necesito pagar por adelantado.

En mi vida tuve la oportunidad, a través de una buena educación, de estar a la altura de mis grandes metas. Pero en Perú no siempre es así. 

La buena educación es un privilegio al que la mayoría de los niños no tienen acceso. Por lo que quise darle a niñas y niños inteligentes con grandes sueños la oportunidad de sobresalir en beneficio de sus familias, de ellos mismos y de nuestro país.  

Y así es como, con amigos, empezó Peru Champs. En este proyecto, damos a niñas y niños talentosos de bajos recursos la oportunidad de recibir una educación de clase mundial y cumplir sus sueños, sean cuales sean. Brindamos becas para estudiar en los colegios de nuestro aliado, Innova Schools, y un programa de liderazgo que mejora sus habilidades blandas.

Actualmente tenemos más de 2000 Champs en 17 ciudades diferentes a lo largo de la Costa, Sierra y Selva en Perú. Niñas y niños con talento que de otra manera no habrían tenido la oportunidad de recibir una educación de calidad y mejorar sus posibilidades de éxito en la vida. Por eso decimos que estamos transformando vidas. Además, por primera vez, tenemos 4 Champs que van a estudiar al extranjero. Uno a Rusia, otro a UWC en Canadá, otro a Berklee College of Music en Boston, y el último a la Universidad de Stanford (esta última también fue aceptada en Duke, Dartmouth, NYU, Oxford, Emory, Georgetown, Swarthmore, entre un total de 12). 

Lo que no me di cuenta cuando empecé el viaje para devolver fue lo mucho que ganaría con el acto de devolver.  En mis años de ambición medí mi éxito en dólares y en poder. Ahora mido mi vida en el número de niños y familias que Peru Champs ayuda en un año determinado, las historias de éxito que generamos gracias al programa, el número de 'gracias', los abrazos y las sonrisas que recibo de los niños y los padres. Vivo mi vida ahora en base a esas métricas de éxito. Son difíciles de cuantificar a veces, pero son extremadamente gratificantes por dentro.

Creo que tengo el mejor trabajo del mundo y probablemente soy uno de los más ricos de mi país. Pero esa riqueza no viene en forma de un auto nuevo, tarjetas de crédito, propiedades o una 'billetera gruesa'. Viene de devolver, de pagar por adelantado. Viene de dar poder a otros. Viene de transformar las vidas de aquellos que de otra manera no tendrían la oportunidad de hacerlo.

Como diría un amigo mío, en este viaje, puedo resumir lo que he aprendido en los siguientes pensamientos:

Una educación privilegiada a menudo conduce a una vida en la que nos encontramos en posiciones de poder. Lugares desde los que tenemos la oportunidad de hacer un impacto duradero y tangible. Una oportunidad que nos brindan las familias en las que nos criamos y las circunstancias en las que tuvimos la suerte de nacer. 

Un número increíblemente grande de personas en todo el mundo no puede pretender tener acceso ni siquiera a los más básicos de estos privilegios - cosas que a menudo damos por sentado. La gratitud es un comienzo. Al igual que la empatía. Pero esto no es suficiente. 

Hoy, mañana o en algún momento del futuro, todos tenemos la obligación de dar poder a los que nos rodean. Devolver al entorno que nos dio tanto. 

Porque si no lo hacemos nosotros, ¿quién más lo hará?

*Nota: Peru Champs Association es una organización registrada 501.(c)3 y puede otorgar certificados de impuestos a los donantes en Estados Unidos, que hagan una donación a través de nuestra cuenta bancaria de US Chase Bank.

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